Pues realmente mi gata estuvo oliendo todo el piso y sobretodo en los sitios donde había chimeneas y ya no estaban. Yo quizás me noté diferente la primera noche, como si “algo” hubiera cambiado (tenía corriente de agua justo atravesando la zona de nuestras cabezas en la cama). Mi marido también notó diferencia. Un descanso más confortable.