Los procesos espontáneos de depuración emocional o física que ocurren en ocasiones después de un tratamiento energético, se conocen como crisis de sanación.
Energías bloqueadas como puntos de dolor
Cuando acudes al osteópata, acupuntor, reikista, masajista o quiropráctico, aparte de movilizar partes de tu cuerpo lo que hacen es desbloquear tensiones, contracturas y puntos de dolor.

Terapias como la acupuntura movilizan la energía corporal
Las partes del cuerpo que duelen indican que allí hay algo que “hace daño”. Una energía o emoción bloqueada que no encuentra salida. Algo que pide a gritos ser liberado.
Pero estos efectos no solo ocurren después de un tratamiento o una terapia. Toda técnica de movimiento consciente del cuerpo, como el yoga, baile libre, pilates, etc. pueden producir crisis de sanación.

Yoga, pilates, baile, danza del vientre… también mueven emociones.
Movimiento, liberación y catarsis
Cuando se desbloquean los puntos de dolor la energía del cuerpo vuelve a circular. Las emociones escondidas en esos puntos se movilizan también y se hacen conscientes. Las ves.

Enfrentarnos a lo reprimido a veces resulta doloroso
El enfrentarte a aquellas emociones que tenías contenidas te puede enfadar, hacer llorar desconsoladamente, hacer aflorar sentimientos de culpa o conectar con recuerdos reprimidos.
No tiene por qué pasarte siempre. Pero si te pasa, no te preocupes, dejar que esas emociones y sentimientos salgan y se manifiesten es bueno. Permítete sentir, sin juzgar ni pensar si lo que estás sintiendo es bueno o malo.
Síntomas físicos
Las crisis de sanación pueden manifestarse en forma de catarsis emocional o bien mediante síntomas físicos.
Los más comunes son: dolor de cabeza, diarreas, fiebre, mucosidad o síntomas gripales.

La tos y los mocos ayudan al cuerpo a “sacar” lo que no necesita
Todo eso es parte de un proceso de depuración en el que el cuerpo se desprende de lo que no le sirve, y que ha sido “movilizado” durante el tratamiento.
Adaptación al nuevo nivel de vibración
He podido comprobar que después de una armonización de geopatías en una vivienda, las personas que viven en ella también han llegado a experimentar en ocasiones crisis de sanación.
Tiene sentido. Aunque no se haya hecho tratado directamente a la persona, la vibración de la casa donde vive ha aumentado y sus habitantes tienen que ajustar su cuerpo a la nueva vibración.
Son procesos de corta duración, por suerte el ser humano es muy adaptable y en poco tiempo los síntomas desaparecen.
Que no experimentes crisis de sanación no quiere decir que el tratamiento o terapia haya sido inútil.
Cada persona es un mundo y tiene su sensibilidad particular y sus propios procesos internos que están en constante evolución. Lo que te afecta hoy no tiene por qué afectarte mañana. Así que no siempre tienes por qué experimentar estas crisis. Pero si ocurren, es bueno saber que todo lo que sientas es normal.
Y saber que todo pasará, y que resurgirás más sabi@ y más fuerte que antes 🙂
Abrazos.