Recientemente compartí en la página de Facebook un enlace a una entrevista al Dr. Masaru Emoto.
El trabajo de investigación del Dr.Emoto consistió en aplicar diferentes estímulos a muestras de agua y ver qué efecto tenían en los cristales de hielo que se formaban al congelarla.
Obtuvo resultados tan interesantes como curiosos:
Palabras positivas como amor, sabiduría, gracias… producían bellísimos cristales de hielo. Agua estructurada en formas hexagonales y figuras armónicas.

Agua estructurada
Conceptos negativos como guerra, idiota, te odio… daban como resultado una cristalización totalmente caótica y sin forma definida.

Agua sin estructura
¿Cómo nos afecta esto a nosotros?
Nuestro cuerpo está formado en su mayor parte por agua. Nuestras células son un 70% agua (el hialoplasma o medio acuoso celular).
Imaginad si el experimento del Dr.Emoto lo extrapoláramos al agua contenida en nuestras células:
¿Cómo reaccionarían a la palabra “idiota” pronunciada repetidas veces durante un largo periodo de tiempo?
Las palabras ofensivas que escuchamos nos alteran a nivel celular, así como lo hacen nuestros propios pensamientos. Por tanto es importante evitar pensamientos destructivos hacia nosotros mismos, ya que el inconsciente no tiene sentido del humor.
Si nos repetimos siempre “soy un desastre” nuestro inconsciente se lo creerá a pies juntillas; él no entiende de sarcasmos ni de ironías. Y el agua de nuestras células reaccionará también de manera caótica y poco armoniosa a la vibración de ese mensaje.
Las malas noticias como foco de baja vibración.
¿Te has fijado que nunca, NUNCA hay buenas noticias en la televisión? ¿Te has fijado que los artículos más virales que circulan por Facebook sólo buscan el morbo? ¿Qué tipo de noticias hay en los periódicos que lees?
Efectivamente, parece que las buenas noticias en el mundo brillan por su ausencia. Aunque haberlas haylas, ya sea por una simple cuestión de estadística. 😉
Constantemente estamos bombardeados por información y mensajes de baja vibración. Mensajes que calan en nuestro inconsciente y que hacen resonar nuestras células de forma caótica. Mensajes que nos generan tristeza, frustración e impotencia.

Vigilemos cómo son los mensajes que recibimos a través de los medios.
Porque además la mayoría de estos mensajes deprimentes nos llegan sin más, sin ofrecernos una alternativa o una solución para que hagamos algo al respecto.
Yo te recomiendo como medida de higiene emocional y mental, el alejarte lo máximo posible del bombardeo continuo de información tóxica que recibimos a través de los medios.
[piopialo]Desinfoxicarte es una buena manera de empezar a equilibrar tu vibración.[/piopialo]
¿Y tú? ¿También has sentido alguna vez la necesidad de alejarte de los medios de comunicación durante un tiempo? Si quieres compartir tu opinión conmigo, te espero abajo en los comentarios.
Con amor,
Interesante artículo . Lo e leído por que tengo una cuñada que abre los chakras con el pendulo pero según ella también te dice cosas si lo preguntas.ella dice que Los Angeles le hablan a su oído. Y que cuando enciende una vela la flama de la vela se le aparece imagen de la virgen . Y sin números de cosas. La verdad que soy un poco incrédula en todo lo que dice . Ya que según los sueños le dicen cosas . Pero ella no es midium ni nada de eso. Solo lo a ido aprendiendo en libros ya que a ella le gusta todo sobre estas cosas.
Gracias Isabela.
En realidad todos tenemos “poderes”, aunque ese concepto está un poco mal entendido.
Todos tenemos intuición, en mayor o menor grado de desarrollo. Y por lo tanto, todos podemos obtener información de nuestros niveles superiores de consciencia.
Me alegro que te haya gustado el artículo y te animo a seguir investigando, ya que es un tema apasionante.
Saludos!
Hola, me gustó el artículo pues ya llevo varios años sin ver noticias, me aburrí de ver y escuchar sobre maldad, crímenes y andar apesadumbrada y escogí resonar con lo simple y bello del mundo. Y si las noticias negativas bajan la vibraciones, pues no las quiero a mi alrededor.
Hola Solange,
sabia decisión. Muchas gracias por dejar tu comentario. Un abrazo!